lunes, 19 de noviembre de 2007

Tres





Maturana
es irremediablemente un ser de costumbres, usted quizás no lo notaría porque estas son parecidas a los cometas en el sentido que el observador no las percibira sino es con un acucioso y metódico sentido de la observación; como nadie se dedica al estudio real de Maturana sera imposible entonces percibir que es un ser de costumbres.
Para Muestra un botón; cada 3 años Maturana sale de su casa un domingo a eso de las 3 de la tarde y camina, al principio sin sentido, al parecer sin recordar que es lo que lo arrastra por las calles del centro semivacio, lo recorre con paso lento, respirando exhalando cada esquina y cada auto y cada perro, sigue sus pasos por la avenida Brasil, el parque, los arbolitos y las palomas y los pasos arrastrándose lentamente, dejándose envolver por los gritos de niños, y los cochesitos; al pasarlos prenderá el 2º cigarrillo, invariablemente serán 3.
Bajará a ver el mar, se concentrara en su sonido, intentara recordar que es lo que lo ha traído ahí, pasara un conocido, le preguntara por su vida, por el trabajo, los niños, el contestara y retribuirá la preocupación con similares preguntas. Sentirá el miedo recorrerlo al principio cuando levante la cara, observe su ventana, ella de blanco, el balcón, una mirada que no es sonrisa ni es nada, la mirará a los ojos, caerá la botella, caerá el cigarrillo, una lágrima, cuando vuelva a pestañear, ella ya se habrá ido.